Sin duda, la profesión del periodista es una de las más sacrificadas en todos los sentidos, pero tambien una de las menos aburridas y que mayor riqueza personal aportan. Todo un tesoro para un buen observador. Durante decadas he ido acumulando retazos de entrevistas personales, jugosas anecdotas y sugerentes relatos que en su momento despertaron mi interes y me resultaron inspiradores. Gran parte de esa documentación terminó acumulando polvo en un cajón de sastre integrado por varias carpetas sin destino definido.

De ese cajón, hace ya más de diez años, surgieron los primeros balbuceos de una ambiciosa novela, con una idea narrativa forjada entre obras maestras del arte medieval, famosos monasterios y ermitas escondidas. bajo los que subyacen realidades tan relevantes en la actualidad como los excesos cometidos en nombre de banderas y religiones.

Periodismo y literatura han corrido paralelos e inseparables en mi caso. La pasión por las lecturas de corte histórico y mi desempeño profesional como especialista en Patrimonio han fraguado en mis primeras incursiones literarias. Tras ‘Lignum Crucis’, en la actualidad trabajo en mi segunda novela,‘Proyecto Escipión’, una historia en la que los severos códigos de honor de la antigua Roma reaparecen en la Tarragona actual en forma de brutales crí­menes.